Cómo comunicarse con los ángeles

¿Cómo me comunico con mis ángeles? A veces en la vida la respuesta es tan simple, que no la ves. Comunicarse con tus ángeles y guías espirituales es una de esas veces. Es simple, pero primero requiere práctica. ¡Incluso para mí, al principio! Tuve que trabajar para descubrir mis habilidades y desarrollar mi capacidad de escuchar lo que venía a mí y a través de mí.

Además de la práctica, la comunicación con los ángeles requiere presencia. Debes aprender a aquietar tu mente para acceder a toda la fuerza de tus dones intuitivos. Recuerda, la mente está hecha para trabajar para ti, no al revés.

¿Todavía estás confundido? Aprende cómo puedes llegar a un estado en el que puedas recibir guía angélica y comunicarte con tus ángeles en esta respuesta canalizada directamente del Arcángel Metatrón.

¿Cómo puedo enfocarme en comunicarme con mis ángeles, cuando la mayoría de las veces, hay muchas cosas en mi mente?

La respuesta simple, y tal vez, la respuesta difícil es que para comunicarse con ustedes los ángeles, simplemente calman su mente, y se concentran en su interior.

Esto, por supuesto, requiere práctica, ya que la mente está acostumbrada a estar a cargo.
La mente está acostumbrada a correr como loca, a dirigir el espectáculo, a pensar lo que quiera. Pero puedes, y aprenderás a aquietarla, aprenderás a tomar el control, aprenderás a pausar la mente, para que puedas sintonizar con tus dones intuitivos que son como corrientes que corren paralelas a la voz fuerte de la mente del ego.

No puedes sintonizarte con ambas. Así como no puedes estar pensando, perdido en una espiral de pensamiento, y estar verdaderamente escuchando, y estando plenamente presente con otro.

Así también, no puedes estar en una espiral de pensamiento, pensando en diez cosas a la vez, y escuchar la guía de tus ángeles.

Y para escuchar la guía de tus ángeles, practica el aquietamiento de tu mente respirando, practicando el escuchar, el escuchar verdaderamente y el estar presente.

Practica el simple hecho de estar y cuando los pensamientos aparezcan, date cuenta de ellos, toma conciencia de ellos, y déjalos ir.

Cuando un pensamiento aparece, enfóquese completamente en él – No deje que rebote dentro y fuera (diez pensamientos al mismo tiempo). Concéntrese en el único pensamiento que aparece, envuélvalo en un globo de luz, un globo de helio de luz, y suéltelo. Deje que el pensamiento flote fuera de su mente consciente y hacia la luz.

Además, enfóquese en ese pensamiento, véalo como una imagen mental, e imagínese que se disuelve en la luz. Déjalo ir. Deje caer su conciencia hacia adentro. Vuelve a la perspectiva. Encuentra la calma y la paz dentro de ti. Relájese. Concéntrate completamente en tu respiración.

Y para apoyarte en esto te ofrecemos un sutil cambio en un ejercicio de respiración.

Inspira, y haz una pausa a mitad de tu respiración. Y ahora, continúe inspirando y haga una pausa.

Ahora, exhale a mitad de camino, y haga una pausa. Y ahora, exhale el resto del camino, y haga una pausa. Continúe con esto.

Y así, inhalar, pausa, inhalar, pausa, exhalar, pausa, exhalar, pausa.

Respira, y toma conciencia. Libera el pensamiento tal como aparece, y practica, practica, practica.

Practica la presencia

Cuando estés conduciendo, conduce. Siente la sensación del volante en tus manos, el asiento debajo de ti, observa la carretera, mira los coches a tu alrededor, estate totalmente presente con lo que estás haciendo.

Si estás lavando los platos, permítete estar completamente presente en ese momento en el que estás, lavando los platos. Siente el plato en tu mano, el frescor del agua, el aire en tu piel. Estar totalmente presente. Practica la presencia.

Esto te da poder cuando conscientemente eliges sintonizarte con la guía angélica, para cambiar, para pausar la mente a petición, para concentrarte.

Y puedes hacer esto. La práctica es necesaria, pero puedes y lo harás.

Además, llama al Arcángel Miguel para que te ayude a despejar tu mente, a liberar los pensamientos, los miedos y las dudas, y a centrarte plenamente en el amor. Y una última variación para ti – Practica una forma de meditación donde escoges una palabra, una cualidad, como el amor. Y hagamos esto juntos ahora.

Amor – Sentir lo que es ser amado. Imagina que estás viendo la palabra «amor» en tu mente. Ve la imagen de un abrazo amoroso, y siente lo que se siente. Conocer el profundo y verdadero significado del amor. Experimenta el amor con todos tus sentidos. Repite en tu mente: «Amor, amor, amor». Y si aparecen otros pensamientos, déjalos que se liberen. Vuelve a centrarte en el amor. Y sabe que puedes hacerlo. Sigue practicando. Se hace más fácil.

A través de tu presencia, atención y enfoque, te llevas a un lugar de receptividad relajada. Este es el estado en el que eres capaz de recibir guía angélica. Puedes recibir guía angélica. Relájate, practica y permanece abierto. Estamos contigo.

Así es.